Poza Rica, Ver.- (Vanguardia de Veracruz).- Empleados municipales pertenecientes al sindicato “Eduardo Núñez Marín” exigen a su secretario general, Vicente Guzmán Oliver, que respete los estatutos de dicha organización y a la brevedad posible emita la convocatoria para celebrar la asamblea general electoral, y de este modo puedan renovar ya al actual comité ejecutivo, que debió concluir su periodo el año pasado, sin que hasta la fecha se haya convocado a nuevas elecciones.

Los trabajadores inconformes señalan que su actual dirigente sindical ha recurrido a todo tipo de pretextos para postergar dicha convocatoria, que le fue solicitada desde el 21 de abril del 2021, pero en ese entonces se valió de un acuerdo del gobierno estatal que concedía una prórroga hasta el 30 de septiembre para celebrar elecciones, como parte de las medidas establecidas para hacer frente a la pandemia de COVID-19, prórroga que después se extendió hasta el 31 de enero del 2022.

Sin embargo, a mes y medio de que concluya este plazo, Vicente Guzmán se sigue negando a convocar a la asamblea general electoral, por lo que los empleados municipales temen que su dirigente sindical pretenda recurrir a sucias artimañas para mantenerse en el cargo, sabedor de que no contará con el voto de la mayoría de sus agremiados, pues ya ni siquiera tiene el apoyo de los demás integrantes de su comité ejecutivo, a quienes ha tenido que falsificarles firmas para validar acciones que en muchos casos atentan contra los intereses del propio sindicato.

Es más, de hecho, su comité ejecutivo ya lo dejó solo, pues ayer trascendió que acaba de renunciar su secretario del Exterior, mientras que los secretarios del Interior, del Trabajo y de Previsión Social ya están jubilados, por lo que sólo sigue en funciones la tesorera.

Trabajadores reclaman la falta de un escalafón en el que se respeten los derechos de los empleados con más antigüedad, por lo que todos los ascensos y demás movimientos laborales son hechos a su conveniencia.

Vicente Guzmán desapareció también la póliza postmortem que tenían como socios de la CROC, de la cual dejaron de ser afiliados, y en su lugar recurrió a la contratación directa con la aseguradora Latino, con la diferencia de que ahora pagan 84 pesos quincenales, en lugar de los 35 pesos que les descontaban por pertenecer a la CROC.

Y no sólo eso, sino que, además, comentan los trabajadores, que prendían cobrar 100 pesos de cuota, en vez de los 84 pesos.

También demandan los trabajadores inconformes un informe pormenorizado de los ingresos que percibe el sindicato por concepto de renta del edificio del salón de la Renault, de la cancha de futbol rápido “Maracaná” y del edificio del PRI, entre otros inmuebles que se rentan, pese a que en su momento hasta se creó una asociación civil que se encargaría de su administración, sin embargo, Vicente Guzmán se autonombró presidente sin convocar a los 143 miembros que integran dicho organismo.

Por otra parte, señalan que tenían una camioneta Suburban que ya se vendió y al momento no saben en qué se invirtió ese dinero.

La situación está muy tensa entre los empleados municipales, quienes temen ser víctimas de represalias por parte de algunos allegados a su dirigente sindical, como ya ha ocurrido con algunas mujeres trabajadoras que han sido agredidas verbalmente y en más de una ocasión han estado expuestas a ser agredidas físicamente.

En total son 680 trabajadores los que conforman el sindicato “Eduardo Núñez Marín”, la mayoría de los cuales quieren ya un cambio en su dirigencia sindical, por lo que están en espera de que se convoque a elecciones para expresar su sentir a través del voto libre y secreto, sin artimañas de ninguna índole y con pleno respeto a sus derechos laborales, como ya está ocurriendo en otros sindicatos del país que ya están viviendo una auténtica transformación.

“¿A qué le teme Vicente Guzmán Oliver que se niega a emitir la convocatoria para la Asamblea General Electoral en tiempo y forma?”, se preguntan los quejosos.