Poza Rica, Ver.- (Vanguardia de Veracruz).- Una estudiante de Poza Rica, denunció haber sufrido maltrato y abuso por parte del Consejo Estudiantil de la Normal Rural “Carmen Serdán”, municipio de Teteles ,Puebla, durante un periodo de 3 días.

De acuerdo a lo vivido, mencionó que el sábado 17 de agosto a ella y a las otras 150 aspirantes al primer semestre fueron despertadas a la medianoche, con 3 canciones de la Normal a todo volumen, las cuales causaron estruendo en sus oídos.

De ahí las integrantes de ese Consejo Estudiantil las levantaron, las obligaron a correr más de un kilómetro, también las pusieron a cargar un bulto de aproximadamente 8 a 10 kilos, así como ejercicios extenuantes de 500 repeticiones

Según su relato, fue sometida a tratos crueles y humillantes, así como obligada a realizar actividades pesadas, las cuales supuestamente eran dentro de la “semana de adaptación”, misma que se convirtió en un calvario.

Con lágrimas, la jovencita de 17 años dijo que tampoco las dejaban tener el celular, y las integrantes del Consejo Estudiantil siempre usaron pasamontañas y nunca les dieron sus nombres, se escondían detrás de una máscara para ocultar su identidad y furia en contra de las novatas estudiantes.

Sentada en la silla, en la sala principal de las oficinas de Vanguardia, esta pequeña valiente afirmó que tanto era el esfuerzo físico que hubo alumnas desmayadas, con crisis nerviosas y demás.

También narró que la comida eran dos porciones de cuchara, el agua era mínima y hasta en el baño las vigilaban.

EL REENCUENTRO CON SU MADRE

La mamá de la menor al enterarse por otra madre de familia, partió el lunes por la tarde hacia la Normal, llegando pidió hablar con su hija por un momento no querían comunicarla.

Sin embargo, gracias a la presión que ejerció, así como algunos pobladores las del Consejo Estudiantil cedieron, y entregaron a la niña con su madre.

“Cuando vi a mi mamá sentí alivio, la abracé y me puse a llorar, porque había vivido los peores momentos de mi vida, pero ahora me preocupan las demás niñas porque decían que si nos salíamos el trabajo iba ser más pesado para quienes se quedaran”, aseguró con un nudo en la garganta.

EL CONSEJO INQUISIDOR

El Consejo Estudiantil, integrado únicamente por mujeres, habría sido el responsable de este trato inhumano y degradante hacia ella y las demás alumnas.

Este tipo de comportamiento es inaceptable, porque va en contra de los principios de respeto y dignidad que deben prevalecer en cualquier institución educativa.

Es importante que las autoridades correspondientes investiguen este caso y tomen medidas para garantizar que los responsables sean sancionados, asimismo la afligida joven con moretones en las piernas recibe la atención y apoyo necesarios para superar este trauma.

Lamentablemente hay quienes soportan este maltrato pues la Normal Rural, es su única forma de sobrevivir en la vida y prepararse como profesionistas.

¿Pero a qué costo? Al del maltrato, la humillación, la denigración como mujeres y seres humanos, pues son rehenes de otras mujeres, quienes les dijeron que se tenían que preparar para futuras manifestaciones y bloqueos en contra del gobierno.

LAS BECAS LES PERMITEN SOPORTAR EL MALTRATO 

Algunas estudiantes, o la mayoría de escasos recursos, soportan este maltrato pues al parecer les dan una beca de 16 mil pesos semestrales, así como un kit que presumiblemente consta de una lap top, papelería, equipo para trabajar y de esa forma no gastar ni un sólo peso.

Pero la situación en la Normal Rural Carmen Serdán, municipio de Teteles, Puebla, es de miedo, pocos saben lo que ahí ocurre porque el Consejo Estudiantil, que no es ni controlado por los maestros o rector, ellas hacen de las suyas, reclutan a las estudiantes en un internado.

De esta situación derivada el fin de semana, al menos 15 padres y madres de familia ya decidieron sacar a sus hijas antes de que algo peor que el maltrato físico y psicológico les pueda pasar.

Finalmente, posiblemente se interpongan recursos legales en contra de quien o quienes resulten responsables, porque violan los derechos humanos de las alumnas. Además, se logró saber que, a pesar de ser un internado de niñas, ahí en la Normal “Carmen Serdán” hay hombres de otras normales, y no saben el motivo por el cual están adentro.

Por Ángel Scagno Castillo

DAD