Poza Rica, Ver.–(Vanguardia de Veracruz).-Estudiantes del Instituto Tecnológico Superior de Poza Rica denunciaron presuntas anomalías en el llamado Centro de Lenguas Extranjeras (CLE), donde los obligan a cursar cinco niveles de inglés, o de lo contrario, no podrán titularse.

Tanto alumnos de los primeros semestres como los que están por concluir sus estudios o se encuentran en residencias, deben cumplir con este requisito. Según los estudiantes, desde su creación el CLE se convirtió, literalmente, en la moneda de cambio de la institución, pues más que realmente contribuir a la formación académica, es utilizado para recaudar dinero, pues este centro de estudios ni siquiera está certificado (a diferencia de otros tecnológicos), así que la constancia que les expiden no tiene valor curricular.

El descontento es generalizado, no sólo se quejan estudiantes, también docentes advierten que Norma Hernández Nava, encargada del área, ha incurrido en actos de prepotencia y humillación a maestros; por lo tanto, no ha desempeñado su labor de manera correcta, provocando que varios profesores presentaran su renuncia.

En el CLE, una de las principales quejas es que, si bien se implementó para evaluar los conocimientos de los alumnos en lenguas extranjeras, la única realidad es que no están certificados, y el documento que expiden de poco sirve a los egresados. Los salones donde imparten inglés no tienen climas y el edificio de cristales, insisten, no tiene salidas de emergencia.

En este sentido, acusan que cada estudiante debe cursar y aprobar cinco niveles; cada uno con un precio de entre 1200 y 1500 pesos; pero también deben costear un libro de 700 pesos, mismo que deben adquirir con los proveedores que la encargada indica, así como una plataforma de 600 pesos.

Uno de los docentes que decidió marcharse de esta institución, aseguró a Vanguardia de Veracruz que la institución decide quién reprueba y quién pasa al siguiente nivel “A nosotros nos decían a quién íbamos a pasar y a quiénes no; para que ellos pudieran tener más tiempo a los alumnos y siguieran pagando. Es una realidad que afecta a los estudiantes, que les impide titularse; varios renunciamos por esas imposiciones”, narra el docente.

Otro testimonio, explicó, refiriéndose a Norma Hernández: “Nos hacía decirles a los alumnos que el material era obligatorio comprarlo, el pago a los docentes constantemente se retrasaba, vivimos abuso de poder, nos pedían comprar licencias de nuestra bolsa, cuando la institución podía proporcionar un servicio de clase en línea; nos bloqueaba la comunicación con las autoridades, no nos daban las herramientas necesarias y no se cumplía el contrato que nos hacía firmar”, expuso otro docente, quien asegura, la mejor decisión que tomó fue retirarse.

En esta institución los mismos estudiantes se encuentran inconformes, porque el costo por semestre es similar al de una escuela particular, y aseguran que la calidad educativa no es la de antes, cuando el Tec de Poza Rica se posicionó como una de las de más prestigio.

Recientemente, estudiantes evidenciaron que pareciera que el ITSPR impide que sus estudiantes puedan titularse o deben pasar varios años para que puedan obtener el título; la mayoría de las quejas deriva de cobros.

De acuerdo con el Proyecto de Presupuesto de Egresos 2022, aprobado por el Congreso del Estado de Veracruz, al Tecnológico de Poza Rica se le asignó un presupuesto de 89.8 millones de pesos para su funcionamiento, sin tomar en cuenta que cada alumno debe cubrir un pago de más de 3 mil 800 pesos, y hay más de 3 mil estudiantes; por lo que los ingresos por semestre son superiores a los 11 millones 400 mil pesos.

A pesar de que se buscó la versión de la dirección del Tecnológico de Poza Rica para que fijara su postura respecto al cúmulo de quejas de sus estudiantes, no se obtuvo respuesta.

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