Poza Rica, Ver.- (Vanguardia de Veracruz).- Durante los primeros 15 días del 2022, la industria de la construcción ha sufrido un impacto negativo ante el aumento de precio más alto en los últimos 14 años en materiales como cemento y varilla. Lo más grave es que el costo final de las obras va a aumentar hasta en un 50 % debido al alza de precios.

Esto se debe principalmente al aumento de precios internacionales en materias primas industriales, la mayoría de los materiales subieron de precio no sólo en México, y según datos del INEGI también subieron de precio los castillos armados hasta en un 43 por ciento; alambre y alambrón, 35, y varilla, un 31 %.

El alto costo en acero, aluminio, cobre, maderas, plásticos y muchos otros materiales es notable en las tiendas. También ha influido la inflación que predomina en México y el panorama podría ser aún más alentador.

En el caso de Poza Rica y varios municipios de la zona, desde el paso del huracán “Grace” que dañó miles de viviendas, abastecedoras de material para construcción aumentaron sus precios de manera notable. La demanda de material fue tan alta que en todos los establecimientos subieron los costos.

Ahora, la crisis económica internacional genera un impacto negativo y afecta de manera directa los costos del cemento que en los últimos días de diciembre se cotizaba aún en 190 pesos; este viernes, al consultar en varios negocios de la ciudad, se constató que el precio es de 215 pesos por cada saco de 50 kilos, lo que significa que tuvo un costo mayor de 26 pesos. Mientras que por tonelada el precio es de 4 mil 200 pesos, es decir, 5 pesos menos por cada saco.

LAS CONSECUENCIAS

Dentro de las afectaciones que deja el aumento de precio en el material, está el sobrecosto de casas nuevas al igual que en construcciones particulares, e incluso la obra pública; a nivel nacional, empresas constructoras han advertido que -tomando en cuenta el presupuesto que se destina para obra pública- el alza a los precios traerá como consecuencia que alcance para menos proyectos, lo que incluso significa que al menos este año las obras de alto impacto sean escasas debido a que será mucho más complicado costearlas.

Asimismo, este aumento representa por ahora un incremento de 17.4 por ciento y son los derivados de acero los que más incidieron en el encarecimiento de toda la canasta de materiales al presentar los mayores incrementos, en el caso de las láminas, el aumento fue de hasta 58 por ciento.

Empresarios de la construcción también acusan que desde la primera semana de 2022 las empresas cementeras aumentaron sus precios hasta en 20 y 25 por ciento, atribuyen esta crisis de precios a la inflación que está 10 puntos arriba de la inflación general en todo el país.

Lo que es peor hasta ahora es que durante los primeros seis meses del año es difícil que los precios se mantengan, pues de un momento a otro pueden aumentar, y con ello, tanto la obra pública como la privada se verá afectada. En consecuencia, cuando las empresas comiencen a licitar por obras tendrán obligadamente que subir aún más los precios de sus propuestas, lo que quiere decir que el dinero alcanzará para menos.