Poza Rica, Ver.- (Vanguardia de Veracruz).- El distribuidor vial se ha convertido en una amenaza para la seguridad de todos; los daños que se observan en columnas, coronas y trabes presagian el peligro, pero la tragedia se está gestando bajo tierra.

Desde su construcción la obra tuvo problemas de mecánica de suelo y ese fue uno de los motivos que enlistó PEMEX para el encarecimiento de la obra, que pasó de 383 millones en 2011 a 746 millones de pesos en 2014.

Todos se escandalizan por las grietas y el deterioro que está a simple vista, pero la mayor preocupación debe ser el estado de las pilas y mesas de cimentación, sobre todo donde se presentaron problemas con el suelo.

A casi 8 años de su inauguración, el distribuidor vial se quedó huérfano, porque PEMEX no tiene recursos para su mantenimiento integral y el gobierno de Poza Rica evade esa responsabilidad bajo el argumento de que no se ha hecho la entrega oficial.

Debemos recordar que en 2011, PEMEX anunció esta obra en pleno boom petrolero del ATG. El 20 de octubre de 2011 dio el fallo de procedimiento de contratación en favor de Construcción y Servicios Integrales Sigma, que ofertó 383 millones.

El temor a que colapse una sección del segundo piso, está más que justificado. Basta ver como se desplomó el arco de bienvenida de Coatzintla, obra que no recibió cuidados en 12 años.

Con apenas restauraciones mínimas, el puente a desnivel que atraviesa la ciudad se volvió tendencia este martes por las cuarteaduras y daños a la estructura que están visibles desde hace varios meses y que podrían aumentar si no se reparan.

Fue el 15 de diciembre del 2014 cuando el distribuidor vial fue abierto a la circulación y, pese a que se pensó sería una obra de alto impacto para la ciudad de Poza Rica, los automovilistas no quedaron contentos; la planeación no fue la adecuada, pues hay quienes consideran que solo benefició a Coatzintla y en la zona centro de Poza Rica se documentaron daños ecológicos al derribar decenas de árboles para edificar el puente.

A casi 8 años de ser entregada, la obra construida por la empresa SIGMA, es motivo de alarma entre los usuarios de redes sociales, quienes insisten en que podría originarse un accidente.

Incluso, en el 2021, ante el reclamo social, las autoridades se vieron obligadas a solicitar apoyo de expertos de la UNAM, quienes valoraron los daños a los cimientos y la estructura en general, pero solo concluyeron que bastaba con resanar las partes afectadas, pero no se atacó el problema de fondo.

Lo grave del caso, es que el puente a desnivel ha sido duramente criticado no solo porque por ahí transitan autobuses o unidades pesadas, también porque se han formados baches y tremendas grietas donde, incluso, crecen árboles que sirven como “atractivo” de la ciudad.

La solución más viable para reparar el distribuidor vial, es asignarle recursos dentro de los proyectos de inversión del Presupuesto de Egresos de la Federación 2023, pero se requerirá del respaldo de los legisladores federales.

Es claro que la tragedia está tocando la puerta a Poza Rica.

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