Poza Rica, Ver.- Este mes está dedicado a las acciones contra el cáncer de mama, ese enemigo silencioso que llega, y a diferencia de otros, éste si avisa; por ello es importante estar alerta ante cualquier signo que pudiera presentarse y no permitir que el mal avance;   por lo que una de las maneras de detectarlo a tiempo es autoexplorarse y acudir a recibir atención para evitar que cause más daño.

Con 43 nuevos casos contabilizados hasta la semana 36, y sólo por debajo de la ciudad de México, la entidad veracruzana es el segundo estado con más incidencia en casos de cáncer de mama y acumula un total de 1,166 en lo que va del 2021.

Según los datos del Centro de Atención contra el Cáncer y la Universidad Veracruzana, Veracruz ocupa el tercer lugar a nivel nacional en muertes por esta enfermedad por debajo de la Ciudad de México y Jalisco, teniendo una tasa de mortalidad en cáncer de mama de 18 mujeres por cada 100 mil habitantes, y cada año se detectan entre 400 y 500 casos nuevos en la población femenina.

Además, se estima que desde el 2000 a la fecha, este padecimiento incrementó 20% la mortalidad de pacientes oncológicos. De acuerdo con el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), entre 2010 y 2018 las defunciones relacionadas con el cáncer o tumores malignos han pasado de 70 mil a 85 mil muertes aproximadamente.

SOBREVIVEN, PERO CON SECUELAS

A lo terrible que representa padecer cáncer se suman factores que merman la salud de los pacientes; generalmente sufren también de depresión, ansiedad o crisis nerviosas de manera frecuente. Quienes logran vencer esta enfermedad a menudo sufren secuelas físicas, mentales y sociales, como cicatrices, dolor, alteraciones psicosexuales y problemas para readaptarse a la sociedad.

Al consultar la opinión de un oncólogo, refirió que lamentablemente hay casos en los que la enfermedad no es curable, pero siempre hacen todo lo posible por mejorar la calidad de vida de los pacientes, lo que les permite que poco a poco las mujeres puedan aceptar el problema. A esta etapa se le conoce como cáncer de mama metastásico, que es cuando el cáncer avanza e invade otros órganos, haciendo complicada la recuperación del paciente.

APOYAN EN DETECCIÓN, TRATAMIENTO Y OPERACIONES

En la ciudad de Poza Rica, Silvia Bustos, quien representa a la asociación Vida Plena Después del Cáncer, compartió que actualmente apoyan a 54 mujeres y un hombre. “Algunas personas son de comunidades de Papantla, Tihuatlán, Cazones, Álamo, y de nuestra ciudad. Les otorgamos los pasajes a Ciudad de México, Xalapa y Veracruz, pero sólo apoyamos cáncer de mama y cérvicouterino”, dijo en entrevista para Vanguardia de Veracruz.

Desde hace años, Vida Plena Después del Cáncer ha logrado apoyar a quienes no tienen posibilidades de  costear un tratamiento o no cuentan con asistencia médica; Silvia Bustos agregó que apoyan desde la detección, el tratamiento, operación y en algunos casos, vacunas.

Sin embargo, la pandemia ha sido un impedimento para seguir apoyando a enfermos; por ejemplo, antes se otorgaban pláticas donde se concientiza y se habla de la importancia de la  autoexploración; llevaban estas charlas tanto a escuelas, iglesias y donde se solicitaran, generalmente para jóvenes.

“LES PEDIMOS QUE SE AUTOEXPLOREN”

En este mes de octubre, Vida Plena tiene programada la iluminación del reloj de la paz el primero de octubre; también una charla sobre tanatología con la maestra Patricia Cuevas Sisniega, desde León, Guanajuato, el 5 de octubre. Habrá actividades virtuales hasta el día 29 del mes.

“A la sociedad en general les pedimos que se autoexploren, que lleguen a tiempo a los tratamientos. Lamentablemente supimos que una de las personas a las que apoyábamos falleció el día 21; esta enfermedad no espera”, finalizó la activista.